sábado, 7 de noviembre de 2015

El Totalitarismo Independentista

El apabullante lavado de cerebro perpetrado por los separatistas mediante la utilización partidista de las herramientas de gobierno puestas en sus manos por el Estado de las Autonomías es la muestra palpable de que los movimientos totalitarios consiguen construir "una sociedad cuyos miembros actúen y reaccionen según las normas de un mundo ficticio". No es fácil describir mejor el estado anímico de millones de catalanes convencidos de que hay que odiar a España por culpa de una invasión acaecida en tiempos de Felipe V. Y a partir de ahí todo un fabuloso edificio de mentiras, imaginaciones y paranoias situadas más allá del debate.


La anticonstitucional inacción de un gobierno nacional tras otro ha logrado que los ingenieros sociales separatistas hayan podido inocular su ideario, desde su más tierna infancia, a millones de ciudadanos. Pero no mediante el conocimiento, sino mediante la manipulación; no mediante la información, sino mediante la ocultación; no mediante la reflexión, sino mediante eslóganes repetidos con machaconería; no mediante la libre discusión, sino mediante mordaza de las voces discordantes; no mediante la educación, sino mediante el adoctrinamiento; no mediante el razonamiento, sino mediante eficaces mecanismos sentimentales como los cantos, los himnos, las banderas, los desfiles, las antorchas, el repique de campanas, los gritos, los arrebatos, los gestos, las poses y las lágrimas.